Práctica 6. Taller de Juegos de Mesa

Durante la sesión de esta semana hemos explorado el potencial de los juegos de mesa en el aula, algo que me parece no solo interesante, sino también muy útil para motivar al alumnado y fomentar el aprendizaje de manera lúdica.

 

 

No soy una persona que juegue mucho a juegos de mesa, pero sí conozco algunos clásicos como el Parchís, Ajedrez, Uno o Dominó. También he jugado alguna vez al Quién es quién, aunque no soy muy experta. Eran momentos diferentes que hacían las clases más divertidas.

Creo que los juegos de mesa pueden ser muy útiles en clase, sobre todo para trabajar la expresión oral, la creatividad o incluso la escritura. Aunque a simple vista parezca que son solo para pasar el rato, bien utilizados pueden servir para repasar contenidos o fomentar el trabajo en grupo. Por ejemplo, con un juego como Érase una vez, el alumnado puede inventar historias utilizando cartas con distintos elementos narrativos, lo que es genial para trabajar la narrativa, la imaginación y la expresión oral de forma divertida y colaborativa.

Me gustaría probar más juegos de este tipo en el aula, sobre todo aquellos que ayuden a perder el miedo a hablar en público o que sirvan para aprender vocabulario de forma más dinámica. Creo que pueden ser especialmente útiles en clases de lengua o literatura, donde a veces cuesta motivar al alumnado.

En resumen, aunque no conozco muchos juegos, me ha parecido muy enriquecedor ver cómo pueden aplicarse al aula y espero poder incorporar alguno en mis futuras clases.